En una universidad de Illinois un grupo de investigadores ha logrado crear una batería que basándose en una construcción de ánodos y cátodos más porosos (lo que facilita el intercambio de iones y por tanto la cantidad de reacciones químicas producidas), que segun dicen es 2.000 veces más potente que las actuales y que además se puede recargar en la milesima parte de tiempo que lo que tardan ahora las que hay en el mercado.
Esto, si viene acompañado de costar un precio mil veces menor sería lo más!!! Pero no habrá tanta suerte, claro. De todos modos esta velocidad de carga y la gran potencia que prometen puede suponer el empujón final para que nos lancemos definitivamente a cambiar nuestros vehículos de combustible fosil por vehículos eléctricos.
Supondrá tener baterías que carguen en segundos, con 30 veces más capacidad o potencia, o con la misma pero ocupando un espacio 30 veces menor.
Esta no es una investigación aislada. En otras partes del mundo otros investigadores como el profesor Chongwu Zhou, de la Escuela de Ingeniería Viterbi, ya trabaja en proyetos similares con nano tubos de silicio poroso. También Maksym Kovalenko, del Laboratorio de Química Inorgánica en el Instituto Federal Suizo de Tecnología de Zúrich investiga con el estaño para mejorar las características de las baterías de iones de litio.
Será esta la solución por el momento? No lo creemos. Tardaremos aún unos cuantos años en ver este tipo de baterías instaladas en nuestros vehículos, smartphones, etc. Quién sabe si ven la luz antes proyectos como las baterías de litio-aire, los de esponja de cobre o las de tipo litio grafeno… y que con tus ojos lo veas, como decía aquel!